martes, 10 de febrero de 2015

La Soyuz 38, orgullo de los guantanameros.

  Por: Pablo Soroa y Niurka Doralis


 Fue Cuba  el noveno país en poner un hombre en el espacio celeste y Guantánamo, la tierra que proporcionó al héroe que protagonizó tal hazaña, el guantanamero Arnaldo Tamayo Méndez, se convirtió en 1980 el primer cosmonauta latinoamericano. 

   El artefacto espacial - prueba fehaciente de aquella misión-, se encuentre ahora  entre las preferencias del visitante que asiste curioso al Museo Provincial de Guantánamo,  para conocer más de aquel hecho, esta institución cultural ubicada en la intersección de las calles Martí y Prado, en el centro histórico urbano de la Villa del Guaso. 

   Con un peso de tonelada y media, la “pieza” resulta monumental  comparada con el resto de las guardadas en el recinto, pero discreta para acoger en su interior a dos adultos, circunstancia que llama la atención de quienes transitan por la Sala Vuelo Conjunto URSS - Cuba: memoria histórica de un vuelo espacial. 

  El salón atesora también numerosas pruebas de aquel vuelo, que duró siete días, 20 horas, 43 minutos y 24 segundos en el complejo orbital Saliut-6 - Soyuz 37, donde se efectuaron experimentos científicos, en beneficios de ambos países. 

    Ese rincón ha devenido uno de los principales atractivos del Museo, cuyas guías  explican que, además del empleado por los cosmonautas para el ascenso y descenso,  las “Soyuz” disponen otros dos módulos: el orbital y el de instrumentación-propulsión, los cuales se desechan y volatilizan en la atmósfera. 

   La muestra expositiva ofrece a través de objetos originales y de gigantografías  un recorrido cronológico, incluido los hechos que antecedieron al vuelo conjunto, la preparación teórica y práctica de los cosmonautas elegidos, la estancia en el cosmos de Tamayo y Romanenko, el regreso a la estepa kasaja y el recibimiento  tributado en La Habana, primero,  y luego en Guantánamo y Baracoa.

   Se conservan entre esas paredes libretas de apuntes sobre las clases recibidas en idioma ruso  durante el adiestra,miento teórico en el Centro de Preparación para Cosmonautas de la Ciudad Estelar Yuri Gagarin, una réplica de la nave Soyuz 38 entregada en Moscú al cubano después de cumplida la misión;  muestras de alimentos deshidratados que formaban parte de la dieta, durante el periplo. 


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